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11 de mayo, 2025

El camino del justo y del injusto

Malaquías 3:13-18

No sé si alguna vez has sentido envidia al ver como alguien injusto prospera. ¿Alguna vez te has enojado porque son los engañadores y estafadores que ganan más dinero que aquellos que buscan caminar en honestidad? alguna vez te has preguntado ¿por qué los que rechazan a Dios parecería que tienen una salud más establece, ingresos más estables, mientras que los que buscan agradar a Dios parecería que sufren más?

Vemos en las noticias que aparentemente a gente corrupta les va bien, como que la ley para ellos es distinta. Vemos en empresas, negocios y emprendimientos que personas con poca moral ascienden muy rápido y personas que mantienen sólidos principios bíblicos parece que todo es cuesta arriba.

Vemos en los colegios y universidades que aquellos que hacen trampa en exámenes y trabajos parecería que les va bien, sin esfuerzo obtienen buenas notas, pero estudiantes que buscan honrar a Dios pagan el precio de horas y días de estudio y probablemente no alcanzan la nota que otros alcanzan en medio de su corrupción.

Falsos maestros de la Palabra parecen ser prósperos financiera y materialmente y hombres fieles al evangelio viven al límite de sus finanzas y de su salud.

Nada de esto parece justo y muchos se preguntan ¿por qué Dios bendice a los injustos y no a los justos? ¿No debería haber una diferencia entre los que obedecen a Dios y los que no obedecen a Dios?

Estas preguntas pueden sonar muy carnales, pero no dejan de ser reales; Gente piadosa, gente madura en la fe, autores de la Biblia hablan de esas cosas. ¿Por qué prosperan los injustos y no los justos?

Asaf el director de adoración en el templo de Israel estaba luchando con algunos pensamientos y el Salmo 73 lo registra de esta manera (NTV) "En verdad Dios es bueno con Israel, con los de corazón puro. 2 Pero en cuanto a mi, casi perdí el equilibrio; mis pies resbalaron y estuve a punto de caer, 3 porque envidiaba a los orgullosos cuando los veia prosperar a pesar de su maldad. 4 Pareciera que viven sin problemas; tienen el cuerpo tan sano y fuerte. 5 No tienen dificultades como otras personas; no están llenos de problemas como los demás. Lucen su orgullo como un collar de piedras preciosas y se visten de crueldad. 7 ¡Estos gordos ricachones tienen todo lo que su corazón desea! Se burlan y hablan solo maldades; en su orgullo procuran aplastar a otros. Se jactan contra los cielos mismos, y sus palabras se pasean presuntuosas por toda la tierra. 10 Entonces la gente se desanima y se confunde al tragarse todas esas palabras. 11 «¿Y qué sabe Dios? -preguntan-. ¿Acaso el Altísimo sabe lo que está pasando?». 12 Miren a esos perversos: disfrutan de una vida fácil mientras sus riquezas se multiplican. 13 ¿Conservé puro mi corazón en vano? ¿Me mantuve en inocencia sin ninguna razón? 14 En todo el día no consigo más que problemas; cada mañana me trae dolor. 15 Si yo realmente hubiera hablado a otros de esta manera, habría sido un traidor a tu pueblo. 16 Traté de entender por qué los malvados prosperan, ¡pero qué tarea tan dificil!"

Entonces sabemos que esos pensamientos son comunes a todo hombre, aún entre cristianos maduros. Y la pregunta es, ¿cuál es la solución? ¿Cuál es la respuesta bíblica a la aparente prosperidad del impío? Y Malaquías 3:13-18 nos va a dar la respuesta.

"13 «Las palabras de ustedes han sido duras contra Mí», dice el Señor. Pero dicen: "¿Qué hemos hablado contra Ti?". 14 Ustedes han dicho: "En vano es servir a Dios. ¿Qué provecho hay en que guardemos Sus ordenanzas y en que andemos de duelo delante del Señor de los ejércitos? 15 Por eso ahora llamamos bienaventurados a los soberbios. No solo prosperan los que hacen el mal, sino que también ponen a prueba a Dios y escapan sin ser castigados" ». 16 Entonces los que temían al Señor se hablaron unos a otros, y el Señor prestó atención y escuchó, y fue escrito delante de Él un libro memorial para los que temen al Señor y para los que estiman Su nombre. 17 «Y ellos serán Míos», dice el Señor de los ejércitos, «el día en que Yo prepare Mi tesoro especial, y los perdonaré como un hombre perdona al hijo que le sirve». 18 Entonces volverán a distinguir entre el justo y el impío, entre el que sirve a Dios y el que no le sirve."

En este pasaje encontramos dos actitudes frente a la prosperidad del impío.

Primero: Quejarse contra Dios. (13-15)
Segundo: Esperar en Dios. (16-18)

PRIMERA ACTITUD: QUEJARSE CONTRA DIOS. (13-15)

"13 «Las palabras de ustedes han sido duras contra Mí», dice el Señor. Pero dicen: "¿Qué hemos hablado contra Ti?". 14 Ustedes han dicho: "En vano es servir a Dios. ¿Qué provecho hay en que guardemos Sus ordenanzas y en que andemos de duelo delante del Señor de los ejércitos? 15 Por eso ahora llamamos bienaventurados a los soberbios. No solo prosperan los que hacen el mal, sino que también ponen a prueba a Dios y escapan sin ser castigados"

"13 «Las palabras de ustedes han sido duras contra Mí», dice el Señor..." ¿Cuáles son esas palabras duras? entendiendo que en el diccionario hebreo "duras" significa "violentas, insolentes o fuertes" Dios no está hablando solo de la respuesta que darán los judíos, Dios también está haciendo referencia a lo que ya dijeron, todas las palabras dichas por lo judíos fueron violentas, duras, insolentes, fuertes.

Recuerdas 1:2 "... Dios afirma 2 «Yo los he amado», dice el Señor. Pero ustedes dicen: ¿En qué nos has amado?"

v.6-7 "... ¿dónde está Mi honor? Y si Yo soy señor, ¿dónde está Mi temor?», dice el Señor de los ejércitos a ustedes sacerdotes que desprecian Mi nombre. Pero ustedes dicen: «¿En qué hemos despreciado Tu nombre? En que ustedes ofrecen pan inmundo sobre Mi altar. Y ustedes preguntan: "¿En qué te hemos deshonrado?". En que dicen: "La mesa del Señor es despreciable"

2:17 "Ustedes han cansado al Señor con sus palabras. Y dicen: «¿En qué lo hemos cansado?». Cuando dicen: «Todo el que hace mal es bueno a los ojos del Señor, y en ellos Él se complace; o: ¿Dónde está el Dios de la justicia?»"

Dios señalando el pecado de Israel y ellos insistiendo en su inocencia y señalando a Dios como el culpable.

3:7-8 "7 Desde los días de sus padres se han apartado de Mis estatutos y no los han guardado. Vuelvan a Mí y Yo volveré a ustedes , dice el Señor de los ejércitos. «Pero dicen: "¿Cómo hemos de volver?". ¿Robará el hombre a Dios? Pues ustedes me están robando. Pero dicen: "¿En qué te hemos robado?". En los diezmos y en las ofrendas."

La insolencia de Israel es persistente, entonces cuando Dios dice en 3:13 "Las palabras de ustedes han sido duras contra Mi..." "¿Qué hemos hablado contra Ti?". La idea en el texto original es, "nosotros no recordamos haber dicho algo contra ti"

Lo que observamos en esta declaración, 400 años antes del Nuevo Testamento es el nacimiento del fariseo, obviamente hubo muchos tipos de legalistas, pero, el corazón que siempre busca auto justificarse, pensando que todos están mal menos él, es propio de los fariseos, es propio de un corazón orgulloso.

Judíos que practicaban la ley pensando que estaban obedeciendo a Dios cuando en realidad sus corazones estaban lejos de Dios, en su opinión creían ser justos, creían ser merecedores de toda bendición y prosperidad porque ellos no eran como los demás que merecían la justicia de Dios.

Lucas 18:11-12 dice: "11 El fariseo puesto en pie, oraba para sí de esta manera: "Dios, te doy gracias porque no soy como los demás hombres: estafadores, injustos, adúlteros; ni aun como este recaudador de impuestos. 12 Yo ayuno dos veces por semana; doy el diezmo de todo lo que gano".

"14 Ustedes han dicho: "En vano es servir a Dios. ¿Qué provecho hay en que guardemos Sus ordenanzas y en que andemos de duelo delante del Señor de los ejércitos?"

(NTV) "14 Ustedes han dicho: "¿De qué vale servir a Dios? ¿Qué hemos ganado con obedecer sus mandamientos o demostrarle al Señor de los Ejércitos Celestiales que nos sentimos apenados por nuestros pecados?"

¿Que ganamos nosotros sirviendo a Dios?, ¿qué beneficio hay si obedecemos su ley? ¿De qué vale servir a Dios? Estas preguntas revelan que principalmente están centrados en ellos mismos y no en Dios. Es la incómoda pregunta que, de vez en cuando llega a nosotros en medio de nuestro caminar en el Señor y es la dolorosa pregunta que se puede presentar en medio de mi servicio al Señor o al final de los años de ministerio, ¿qué provecho he sacado de todo esto? ¿ha valido la pena tantos sacrificios?, lo que realmente estoy preguntando es ¿Cuál es la recompensa por mi bondad y servicio a Dios?.

Escucha la queja de Israel, ¿qué provecho hay en que guardemos sus ordenanzas y en que andemos de duelo cuando pecamos delante del Señor de los ejércitos? Según este pueblo guardar los mandamientos de Dios no les proporcionó ningún beneficio, arrepentirse de sus pecados para ellos no representaba nada porque sus circunstancias seguían siendo las mismas.

Los judíos decían "estamos obedeciendo a Dios, estamos haciendo nuestra parte" piensan que han cumplido con su parte del pacto, a este pueblo no le interesa servir a Dios porque él sea digno, no les interesa servir a Dios porque aman a Dios o porque temen a Dios, sirven a Dios por lo que ellos piensan pueden recibir de Dios.

Algunos podrían preguntarse ¿vale la pena ser cristianos?, ¿tomar mi cruz y seguirlo que veneficio me trae? ¿seguirlo me ha costado perder amistades, relaciones? ¿seguirlo me costado el rechazar algunos trabajos? ¿realmente vale la pena? Si tienes estás preguntas no has entendido la obra de Cristo.

2 Corintios 4:16-18 dice: "16 Por tanto no desfallecemos, antes bien, aunque nuestro hombre exterior va decayendo, sin embargo nuestro hombre interior se renueva de día en día. 17 Pues esta aflicción leve y pasajera nos produce un eterno peso de gloria que sobrepasa toda comparación, 18 al no poner nuestra vista en las cosas que se ven, sino en las que no se ven. Porque las cosas que se ven son temporales, pero las que no se ven son eternas."

El pastor McGee dice: "Hay personas en la iglesia los domingos por la mañana que creo que se beneficiarían más si salieran a dar un paseo que si fueran a la iglesia. El corazón de ellos no está allí. Van sólo a criticar a los demás, sólo miran a los demás o se duerme la siesta. Si su corazón no está en ello, si usted no ama a Dios, si usted no quiere alabarle y adorarle, si no quiere servirle, entonces su cristianismo carece de valor"

Si estás en servicio evalúa tu corazón, ¿por qué estás en el ministerio? ¿qué esperas del ministerio? ¿qué esperas de Dios? (Filipenses 2:5-8)

"14 Ustedes han dicho: "En vano es servir a Dios. ¿Qué provecho hay en que guardemos Sus ordenanzas y en que andemos de duelo delante del Señor de los ejércitos?"

Esta expresión "en vano" es interesante porque ellos piensan que el resultado de su servicio estaba siendo en vano cuando en realidad su servicio mismo era "en vano" porque su corazón estaba lejos de agradar a Dios.

Escucha lo que Jesús dice en Mateo 15:8-9 "8 Este pueblo con los labios me honra, pero su corazón está muy lejos de Mí. 9 Pues en vano me rinden culto, enseñando como doctrinas preceptos de hombres".

Entonces lo que Israel está diciendo es que su adoración era "en vano" porque Dios no los bendecía, Dios dice que su adoración era "en vano" porque sólo adoraban para ser bendecidos, Israel no puede ver su propio pecado, no pueden entender que la causa de su sufrimiento es su rebelión, prefieren quejarse y decir "no vale la pena servir a Dios."

Si pensamos en la historia de Israel, el quejarse ha sido un hábito desde el inicio del pueblo Israel, el hecho de quejarse o en términos de Moisés el hecho de murmurar contra Dios les trajo consecuencias; vemos en éxodo de que tan pronto como cruzaron el mar rojo empezaron a quejarse; Este pueblo después de haber visto la mano poderosa de Dios moviéndose para liberarlos de Egipto, como Dios separa las aguas del mar rojo y caminan en tierra seca, son guiados por Dios en el día con una nube que a además les servía de protección frente a la intensidad del sol, una columna de fuego por la noche para calentar al pueblo, testigos de milagros extraordinarios y visibles.

Números 14:1-4 dice: "Entonces toda la congregación levantó la voz y clamó, y el pueblo lloró aquella noche. 2 Todos los israelitas murmuraron contra Moisés y Aarón, y toda la congregación les dijo: «¡Ojalá hubiéramos muerto en la tierra de Egipto! ¡Ojalá hubiéramos muerto en este desierto! 3 ¿Por qué nos trae el Señor a esta tierra para caer a espada? Nuestras mujeres y nuestros hijos van a caer cautivos. ¿No sería mejor que nos volviéramos a Egipto?». 4 Y se decían unos a otros: Nombremos un jefe y volvamos a Egipto". Queja más queja más queja, ¿por qué? por un corazón orgulloso que creía que merecía lo mejor, "si soy tan bueno porque estoy sufriendo".

Uno lee esto y piensa ¿cómo es posible que esos judíos viendo esos milagros no confiaron en Dios?, ¿cómo es posible que ellos se quejen? y luego nos damos cuenta de que el mismo pecado que habitó en ellos habita en nosotros porque nos creemos mejor que los judíos, mejor que los demás "si yo estuviera ahí no lo haría" "yo me hubiera arrepentido" "jamás yo haría algo así"

Pablo nos dice en 1 Corintios 1:10-11 "10 Ni murmuren, como algunos de ellos murmuraron, y fueron destruidos por el destructor. 11 Estas cosas les sucedieron como ejemplo, y fueron escritas como enseñanza para nosotros, para quienes ha llegado el fin de los siglos."

Debemos crucificar nuestro orgullo, nuestra arrogancia, debemos entender que no merecemos nada y si recibimos algo es por pura gracia, es pura misericordia, hermano ya deja de quejarte como si Dios estuviese en deuda contigo, 1 Corintios 4:7 "7 Porque ¿quién te distingue? ¿Qué tienes que no recibiste? Y si lo recibiste, ¿por qué te jactas como si no lo hubieras recibido?"

(NBLA) "15 Por eso ahora llamamos bienaventurados a los soberbios. No solo prosperan los que hacen el mal, sino que también ponen a prueba a Dios y escapan sin ser castigados"

(NTV) "15 De ahora en adelante llamaremos bendito al arrogante. Pues los que hacen maldad se enriquecen y los que desafían a Dios a que los castigue no sufren ningún daño"

¿Por qué son bienaventurados los soberbios, los arrogantes? según los israelitas porque ellos son los que prosperan, ellos son los que se enriquecen, incluso se rebelan contra Dios y no les pasa nada, los judíos están diciendo "queremos ser como ellos, queremos tener lo que ellos tienen", Israel siente envidia de los injustos, ellos dicen, "los soberbios son felices, desafían a Dios, pecan contra Dios y nos les pasa nada, quiero ser como ellos". Dios no hace nada contra el impio, entonces de que nos sirve guardar los mandamientos del Señor si al impío le va bien. No les importa honrar a Dios, no les importa agradar a Dios, sólo les importa satisfacer sus deseos.

A este pueblo se le olvidó su historia, recuerda, sus padres tentaron a Dios en el desierto y ¿qué es lo que pasó? Hebreos 3:7-11 dice: "Por eso el Espíritu Santo dice: Cuando oigan hoy su voz, 8 no endurezcan el corazón como lo hicieron los israelitas cuando se rebelaron, aquel día que me pusieron a prueba en el desierto. Allí sus antepasados me tentaron y pusieron a prueba mi paciencia a pesar de haber visto mis milagros durante cuarenta años. 10 Por eso, estuve enojado con ellos y dije: "Su corazón siempre se aleja de mí. Rehúsan hacer lo que les digo" 11 Así que en mi enojo juré: "Ellos nunca entrarán en mi lugar de descanso"

No confundas la paciencia de Dios con tolerancia, familia cuidado, el pecado nos hace irracionales, vemos la prosperidad del limpio y la envidia nos vuelve locos, no podemos pensar bien, cuidado.

Debemos prestar atención a las palabras de Pablo en Gálatas 6:7-8 "7 No se dejen engañar, de Dios nadie se burla; pues todo lo que el hombre siembre, eso también segará. Porque el que siembra para su propia carne, de la carne segará corrupción, pero el que siembra para el Espíritu, del Espíritu segará vida eterna."

Los israelitas dicen "los soberbios ponen a prueba a Dios y escapan sin ser castigados" no, nadie se escapa, nadie escapa de la justicia de Dios, es cierto que en este momento todavía no han recibido juicio y eso es porque Dios en su gran paciencia, en su gran misericordia ha decidido reservar todo el juicio para el día final, dando tiempo para que se vuelvan a él; A veces esto puede lucir frustrante porque Dios a sus hijos los disciplina en el momento que pecan, la razón, no hay juicio final para nosotros, pero con el impío Dios en su paciencia reserva su ira, reserva su juicio para el día final. Malaquías 4:1 "El Señor de los Ejércitos Celestiales dice: El día del juicio se acerca, ardiente como un horno. En aquel día el arrogante y el perverso serán quemados como paja. Serán consumidos, desde las raíces hasta las ramas."

SEGUNDO: ESPERAR EN DIOS. (16-18)

"16 Entonces los que temían al Señor se hablaron unos a otros, y el Señor prestó atención y escuchó, y fue escrito delante de Él un libro memorial para los que temen al Señor y para los que estiman Su nombre. 17 «Y ellos serán Míos», dice el Señor de los ejércitos, «el día en que Yo prepare Mi tesoro especial, y los perdonaré como un hombre perdona al hijo que le sirve». 18 Entonces volverán a distinguir entre el justo y el impío, entre el que sirve a Dios y el que no le sirve."

¿Quiénes son los que temían a Jehová si en todo el escrito de Malaquías Israel ha estado quejándose y rebelándose contra Dios? Recordemos que Israel en su historia se ha caracterizado por ser una nación rebelde, sin embargo, Dios siempre ha mantenido un remanente.

"...los que temían al Señor se hablaron unos a otros..." no dice el texto que hablaron, pero podemos inferir que cuando hablaron unos con otros, decían "nosotros vamos a obedecer, si Dios dice, volveos a mí, entonces nosotros vamos a volver a Dios, se animaron a obedecer a Dios, a tomar pasos para arrepentirse, ofrecer ofrendas dignas del Señor, no unirse en yugo desigual, no codiciar a mujeres que servían a otros dioses, enseñar al pueblo la ley de Dios, no quebrantar el pacto matrimonial, dar sus diezmos, poner por obra todas las exhortaciones que Dios da en este libro"

Entonces "...el Señor prestó atención y escuchó..." el texto está señalando la cercanía de Dios con aquellos que le obedecen. La idea es que esas personas comienzan a orar, comienzan a tomar resoluciones en su corazón y Dios se acerca para prestar atención a lo que están diciendo. Dios tiene la disposición y la disponibilidad de bendecir a los que realmente le obedecen.

"16...y fue escrito delante de Él un libro memorial para los que temen al Señor y para los que estiman Su nombre..."

Eso es algo que se hacía con cierta frecuencia en el Antiguo Testamento, de que alguien construya algo como un memorial, un recordatorio de algo que Dios había hecho. Esos hombres justos temerosos de Dios jamás querían olvidar el llamado de Dios y de su decisión de obedecerlo. Jamás querían olvidar el mensaje de Dios para ellos.

Entonces, escriben un libro, "de aquí en adelante vamos a volvernos a Dios y prestar atención a lo que él nos dice". Eso no es un rito para ganar el favor de Dios, es un recordatorio de la gracia de Dios que habían recibido.

En 1 Samuel 7, después de ganar una batalla contra los filisteos Samuel tomó una piedra y la llamó Ebenezer que significa "Hasta aquí nos ha ayudado el Señor"; la idea era no olvidar como Dios había ayudado a su pueblo, ellos entendían en ese recordatorio que "si Dios me ha ayudado en este momento, Dios va a ser fiel en el futuro también".

Entonces, estos hombres temerosos de Dios, esos creyentes, querían recordar las palabras de Dios para serle fiel en el presente y en el futuro. Escucha la respuesta de Dios.

"17 «Y ellos serán Míos», dice el Señor de los ejércitos, el día en que YO prepare Mi tesoro especial, y los perdonaré como un hombre perdona al hijo que le sirve"

Esta expresión "...mi tesoro especial..." nos hace referencia a Éxodo 19:5-6 "5 Ahora bien, si me obedecen y cumplen mi pacto, ustedes serán mi tesoro especial entre todas las naciones de la tierra; porque toda la tierra me pertenece. Ustedes serán mi reino de sacerdotes, mi nación santa". Este es el mensaje que debes transmitir a los hijos de Israel."

Entonces, esas son las dos estipulaciones del pacto. Israel va a obedecer toda la ley, y si Israel obedece toda la ley, entonces Israel va a ser una nación santa, un tesoro especial para Dios. ¿Cuál es el problema? El problema es que Israel no tiene la capacidad de cumplir su parte del pacto, no tiene la capacidad de obedecer la ley, pareciera que no hay esperanza para Israel. Aquí es donde vemos las buenas noticias, Dios dice, "el día en que YO prepare Mi tesoro especial"

El texto no dice "van a ser un especial tesoro en el día que ustedes me obedezcan". Dios dice, "ustedes serán un especial tesoro cuando YO actúe".

Entonces, esta promesa no tiene que ver con el antiguo pacto y las condiciones del antiguo pacto. Esta promesa está señalando un nuevo pacto. La condición del antiguo pacto fue la obediencia del hombre. La condición del nuevo pacto es la intervención de Dios a favor del hombre. Y esto se hace aún más claro al final del versículo 17, cuando dice, "y los perdonaré como un hombre perdona al hijo que le sirve"

Israel pensó que merecía todas las bendiciones de Dios. Israel se creía inocente (negaba su pecado), creían que sus buenas obras externas ganaban el favor de Dios, no les interesaba la condición de su corazón, no les importaba usar cualquier medio para cumplir las ordenanzas de Dios, ellos entendían que no tenían ningún problema, el problema era Dios. Pero, este remanente temeroso de Dios, entendieron que estaban en pecado, entendieron que necesitaban volver a Dios.

La respuesta de Dios es clara "los perdonaré tan rápido como un padre perdona a su hijo". En la parábola del hijo pródigo, el hijo está lejos todavía cuando el padre lo ve y corre hacia él y ni siquiera permite que el hijo termine su confesión y ya le abraza, le da su anillo, arma un banquete, quiere festejar.

La razón del porque el resto del pueblo no quiso volver a Dios es porque amaban más su pecado que a Dios, ellos iban a vivir quejándose y abrazando el camino de los impíos, haciendo responsables a todos sin asumir su propia responsabilidad por sus acciones.

Debo aclarar que, no es la obediencia del hombre la que activa el perdón de Dios. Las obras humanas no figuran acá, el texto dice "ustedes serán un especial tesoro cuando YO actúe... cuando YO los perdone" Observa el orden, primero YO voy a actuar, luego YO los voy a perdonar, entonces ustedes serán mi especial tesoro.

Para muchos esta serie ha sido un llamado de parte de Dios diciendo VUELVAN A MI, ese es Dios actuando, ¿cómo responderás? La respuesta de estos hombres temerosos fue abandonar toda práctica contraria a Dios, me arrepiento en respuesta a lo que Dios está haciendo

"18 Entonces volverán a distinguir entre el justo y el impío, entre el que sirve a Dios y el que no le sirve."

Si bien no ha pasado aún, pero llegará ese día donde Dios juzgará, hoy el injusto prospera, hoy el injusto se sale con la suya, consigue lo que quiere por los medios que quiere, pero viene el día del Señor.

CONCLUSIÓN: ¿ENTONCES CÓMO DEBEMOS VIVIR?

Nuestra respuesta natural conociendo al Señor debería ser NO QUEJARNOS, nuestra respuesta frente a la aparente prosperidad del impío debería ser ESPERAR. Tener esperanza de que Dios lo va a arreglar. Tal vez no hoy, tal vez no mañana, pero lo va a arreglar.

Escucha iglesia la vida cristiana solamente tiene sentido a la luz de la eternidad. La vida cristiana solo tiene sentido cuando entendemos de que esta vida es corta, es temporal, lo que hoy vivimos lo vivimos con los ojos puestos en la eternidad, 1 Corintios 15:19 dice: "19 Si hemos esperado en Cristo para esta vida solamente, somos, de todos los hombres, los más dignos de lástima."

Hoy debes tomar una decisión, o te sigues QUEJANDO de tus circunstancias mientras envidias la prosperidad del impío ESPERAS pacientemente un nuevo mundo, un nuevo cuerpo, una nueva tierra, vale la pena esperar cuando mirar la temporalidad de esta vida, frente a la eternidad que tenemos en Cristo.

Las pruebas que hoy experimentamos nos preparan para la eternidad ¿cuál la razón? Dios nos está perfeccionando, nos está santificando, nos está transformando para el gran día de la revelación de la gloria de Cristo.

Volvamos con Asaf al Salmo 73 "17 Entonces entré en tu santuario, oh Dios, y por fin entendí el destino de los perversos. 18 En verdad, los pones en un camino resbaladizo y haces que se deslicen por el precipicio hacia su ruina. 19 Al instante, quedan destruidos, totalmente consumidos por los terrores. 20 Cuando te levantes, oh Señor, te reirás de sus tontas ideas como uno se ríe por la mañana de lo que soñó en la noche. 21 Entonces me di cuenta de que mi corazón se llenó de amargura, y yo estaba destrozado por dentro. 22 Fui tan necio e ignorante; debo haberte parecido un animal sin entendimiento. 23 Sin embargo, todavía te pertenezco; me tomas de la mano derecha. 24 Me guías con tu consejo y me conduces a un destino glorioso. 25 ¿A quién tengo en el cielo sino a ti? Te deseo más que cualquier cosa en la tierra. 26 Puede fallarme la salud y debilitarse mi espíritu, pero Dios sigue siendo la fuerza de mi corazón; él es mío para siempre. 27 Los que lo abandonen, perecerán, porque tú destruyes a los que se alejan de ti. 28 En cuanto a mí, ¡qué bueno es estar cerca de Dios! Hice al Señor Soberano mi refugio, y a todos les contaré las maravillas que haces."

Expositor

E

Erick Miranda R.

Pastor Principal - ESP

Pastor principal de la Iglesia. Junto a varias familias fundó la congregación En Su Palabra hace casi 14 años.

Material de Estudio

Este es el documento que se compartirá en el Grupo de Discipulado Familiar

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Serie: Vuelvan a mí

Una serie de enseñanzas expositivas sobre el libro de Malaquías que confronta la religiosidad vacía y llama al pueblo de Dios a una vida de fe sincera, obediencia y reverencia, desde una perspectiva bíblica reformada.